Una marca con historia… En aquellos maravillosos años 50 llegaba Bill Rosenberg y abría el primer Dunkin Donuts en Quincy, Massachusetts.
Por aquel entonces el blanco y negro empezaba a dar paso al color, y eso era precisamente lo que traían nuestros dunkins: color.
Durante muchos años la marca se extendió por Estado Unidos, convirtiéndose en una empresa líder con reconocimiento mundial.